Torrens como empresa internacional.
El proceso de internacionalización empresarial experimentó un crecimiento notable entre 2007-2008, coincidiendo con la crisis económica en nuestro país y, especialmente, en 2011. Para muchas empresas, la decisión de internacionalizar sus operaciones ha sido clave para reforzar su posición a largo plazo, independizarse del mercado local y diversificar sus fuentes de ingresos.
La internacionalización no es una tarea sencilla ni se logra de la noche a la mañana; implica asumir riesgos y valentía por parte de las empresas, habilidades que no todas poseen.
Sin embargo, los beneficios son evidentes: mayor competitividad, crecimiento, consolidación de la marca y acceso a nuevas oportunidades de negocio. Por supuesto, toda estrategia internacional conlleva riesgos, desde factores políticos y legislativos hasta condiciones económicas. Es crucial contar con un sólido asesoramiento que ayude a evaluar y mitigar estos riesgos a lo largo del proceso.
En Torrens, líder en el sector de equipamiento hotelero, apostamos por la internacionalización en 2011, estableciendo delegaciones con fábricas propias en República Dominicana y México, lo que nos ha proporcionado una valiosa experiencia para trabajar en cualquier parte del mundo. Además, Torrens ha realizado proyectos tanto en lugares paradisíacos como Maldivas, Bahamas, Zanzíbar o Cabo Verde; como en grandes epicentros como Nueva York o Londres.
Nuestro enfoque colaborativo con cadenas hoteleras españolas y americanas nos ha permitido seguir creciendo y ofreciendo servicios de calidad y profesionalismo a nuestros clientes.
El éxito en nuestras operaciones internacionales nos impulsa a seguir explorando nuevos destinos y oportunidades de crecimiento.
















